Muy lejos

Levantarse sabiendo que en Buenos Aires faltan 6 horas para q despiertes, agarrar el celular para mandarte un mensaje y darme cuenta que no vas a leerlo ahora, que tendré que esperar muchas horas.

En este momento miro el reloj 18 hs, fuera está frío 1 grado, intento leer los diarios, no entiendo ruso, busco noticias en los diarios en español y veo una foto de una mujer con algo en la mano, es una cabeza, la de un niño, y los titulares que dicen una niñéra decapitó a la niña que cuidaba. Pienso, en Argentina pasan cosas horribles pero no tanto. Esta mañana caminé buscando libros de historia sobre este lugar donde me tocará quedarme 2 largos años, espero terminar antes, odio este sitio, y no estás vos, lo odio más.

La llegada a Moscú es caótica: una cola que casi sale de la estación para comprar el boleto para el subte  y otra vez las escaleras al infierno –dicen que la escalera mecánica más larga del mundo está en Tokio, pero éstas yo creo que son más grandes. Llego al albergue, aquí dejaron de limpiar el día que lo abrieron y encima están en obras por la escalera y hay que tener mil ojos para no matarte. Por suerte el que me contrató me encontró un departamente mucho más limpio y mejor, creo que el concepto de limpieza en este lugar no es el mismo que solemos tener en Argentina.

Lo primero  que visito es la Plaza Roja: Genial! San Basilio, las murallas del Kremlin, el mausoleo de Lenin, los grandes almacenes Gum y el museo ruso, todo espectacular, y un monasterio, el primero de varios del centro y de la periferia. En Moscú gasté bastante poco, las cosas no están muy cerca ya gasté 3 de los 10 boletos del subte.

El segundo día intento arreglar las visitas fuera de la ciudad: el anillo de oro. Unos pueblos patrimonio de la humanidad que están “relativamente” cerca de Moscú, el más alejado a unos 300 km. En Moscú no parece que haya oficina de turismo [¿Seguirá siendo así?]. Pregunto al recepcionista del departamente si puede comprar los billetes de tren, después de la experiencia de San Petersburgo quiero evitar irritarme, no me cuesta mucho. Me dicen que no delante de un cartel que dice que sí los compran, pero bueno, son rusos… Salgo a primera hora a comprar las entradas para el Kremlin. Me dan para ver la Armería –demostración de poderío ruso: joyas, marfil, oro, plata…– a las 10:00 y son las 10:17. Así que, después de verla, busco una “oficina de turismo”que me averiguó el recepcionista, aunque no está segura de que eso exista.

Efectivamente: no existe. Pero hay una agencia de viajes cerca, así que voy a ver si hay circuitos de un día a Suzdal –el pueblo en cuestión al que quirto ir del anillo de oro– para el día siguiente. Pregunto si hay alguien que hable inglés y me responde una mina “¿dónde?“, en tu casa no te digo?!?!?!?! ¡pues aquí! ¿dónde va a ser? Le pregunto por el viaje y me manda a otra que habla menos inglés. Se lo preguos y casi veo un ictus en directo, la mujer se empieza a hiperventilar, mueve los ojos sin saber dónde mirar, las manos… y me acaba mandando a otro sitio. El otro sitio está cerrado y parece que abandonado la verdad. Vuelvo y me dice que mañana, que sí, que está cerrado, que hoy sólo abren ellos… sin palabras. Encuentro otra agencia de viajes y aquí sí que hablan inglés, pero me dicen que esos circuitos son de dos días y que sólo en fin de semana, de esa forma es como me vuelvo al departamento y decido quedarme lo que resta del día sin cruzar con ningún ruso.

Lo único bueno desde que llegué fue haber compartido con vos esa película que me hizo llorar, Ja! cuánto hace que no lloraba. Y no importaron las 6 horas, sólo verla y comentar con vos, como si estuvieras aca. De verdad te extraño, creo q volaré antes de lo planeado.

Y ahora a seguir con Los Mosqueteros...

Siempre estarás aquí

Y esta mañana al abrir los ojos encontré el mejor regalo que la vida puede darme, un mensaje tuyo, diciéndome: "Ya estoy de vuelta, no desesperes no vas a estar sola"  Y eso hizo que mi corazón se acelerara y sintiera que es verdad, pase lo que pase, estés donde estés, volverás a mí. Acaso la vida me recompensa tanto dolor con tu amor incondicional? Será que al final de cuentas no soy tan mala persona y merezco tenerte junto a mí? No lo sé, sólo estoy segura que esta tarde podré llorar en tu hombro, que recibiré ese abrazo que tanta necesidad tuve estos últimos días.

Es como el sueño perfecto, imposible, saber que siempre vuelves a mí. Decirte que estoy demasiado triste y vos haciendo lo increíble para calmar mi dolor. Después de tantos años, todavía no lo puedo creer.

Y esta tarde caminaremos de la mano, y me dirás las cosas lindas que sé de memoria y me encantan cuando salen de tu boca, te contaré hasta el cansancio todas los recuerdos que tengo guardados de Charly, me alimentaré con tus besos y podré consolarme en tus brazos.

Sólo vos podés saber lo que esta partida significa para mì, una nueva despedida sin poder decir adiós, con el amargo sabor de tantas cosas por decir y esa persona a quien iban dirigidas no volverá a escucharlas, sé que llegará mi cariño a esa nube donde hoy habita, pero no es lo mismo, no puedo volver a ver su mirada diciéndole lo mucho que ha significado para mí, agradecer la eterna compañía en los días difíciles, las risas y los chistes, la cantidad de cumpleaños que festejamos juntos, convertirse en el tío Charly y hoy no está. Vos, sabrás qué decirme y como acallar la agonía que desde hace 3 días padece mi corazón.

Pensaba que faltaban tantos días para tu regreso, que debería conformarme con tus mensajes de voz o algún que otro mensaje de texto y no, dentro de un par de horas te tendré acá cerquita, para poder sentir tu olor, para llenarme hasta explotar de tu amor porque allí siempre estarás para mí, como siempre yo estoy para vos.

Podré contarte todas las cosas que han pasado esta semana, decirte que esta vez con respecto a los perdones y el olvido te has equivocado y que mucha gente no siempre cambia para mejor, que me quedó ese sabor amargo del beso no dado o el dolor no curado y sé que como siempre no alcanzará el tiempo y que cuando me dé cuenta será la hora de la partida y deberé volver a esperar hasta tu regreso, pero no importa, hoy sé que dejaste todo por mí y eso, nada más importa, porque nunca, jamás en la vida, nadie absolutamente nada dejó nada por mí.

Gracias!!

Adios!!

Y hoy que el día despertó más triste que el de ayer. De golpe te das cuenta que eso que creíste era una pesadilla, comprobás que es verdad, esa persona que tanto querías, que te hacía reír, que te contagiaba su energía, y te daba tantas y tantas cosas, de golpe ya no estará más.

Aunque lo busques por todas partes ha partido rumbo al cielo, porque alguien tan fantástico, sólo puede haber ido directo al cielo.

Y será que cuando alguien a quien querés como un hermano muere, querés creer que hay otra vida, que no se termina con la muerte, que hay algo más allá, que podré volver a abrazarlo, a escuchar sus chistes, a cubrirlo cuando hacía falta.

Cuánto te voy a extrañar! Ahora que habías vuelto a mi vida, ahora que estábamos otra vez juntos, en este momento que podías recuperar el tiempo perdido te fuiste.

Es inexplicable el dolor que estoy sintiendo, porque cuando ayer me enteré no lo quise creer, fue como esas cachetadas que son tan dolorosas que vos crees que es mentira, que no pasó, no querés creer que es verdad.

Pero ya no estás más y duele, cómo duele.

Me quedan tus fotos, los hermosos recuerdos compartidos, tu cariño, confidencias, las risas, los mates, mis horribles mates, las pelis que veíamos. Y guardaré todo eso en un rincón de mi corazón, para que cuando sea insoportable el dolor pueda volver a tenerte acá conmigo.

No es justo que te hayas ido ahora.

Si, hoy seré más egoísta que nunca, cómo te vas a ir cuando no hay nadie, cuando me dejás sola, cuando todos aquellos en quien me podría apoyar no están? No es justo!! No te pude decir mil veces te quiero. No hubo un chau, ni una despedida como correpondía. Cómo duele!!

Adios!! Quedó un espacio vacio junto a mí, pero sé que donde quieras que hayas ido estarás!!


Te quiero mucho Charly y no te olvidaré jamás.